Me especializo en TRADUCCIÓN, REVISIÓN, EDICIÓN sobre:
Puedo interpretar para el oficial público en tu boda y traducir todos los documentos necesarios, como DNI, pasaporte, diplomas, programas de estudio y constancias, entre otros.
Puedo asesorarte sobre qué examen te conviene rendir y brindarte información sobre la preparación para el mismo.
La apostilla es una legalización que otorga validez internacional a un documento original. Antes de solicitarla, es importante verificar que el país de destino sea miembro del Convenio de La Haya. En caso contrario, ese país puede requerir otros procedimientos para aceptar documentos oficiales.
Luego de que el documento fue traducido por un traductor público matriculado, el documento debe legalizarse y finalmente se vuelve a apostillar la traducción. Este último paso es un requisito para que tu documento esté libre de problemas a la hora de salir del país.
La apostilla del documento se realiza en el país de origen del documento. Es decir que si emigraste a otro país y tu documento no está apostillado deberás pedir la apostilla digitalmente al país de origen del documento.
Te asesoro en todos los trámites relacionados con apostillas, legalizaciones de documentos y, por supuesto, realizo la traducción adecuada según los requisitos del país de destino.
Me ocupo de traducir tus documentos personales y académicos para que no tengas que preocuparte por los trámites y puedas concentrarte en tu mudanza. Además, cuento con un equipo de abogados especializados en derecho internacional para garantizar que no tengas inconvenientes al presentar tu documentación.
Me aseguro de que tu documentación esté correctamente traducida y cumpla con los requisitos de Migraciones para que el proceso sea más sencillo y sin inconvenientes.
Cuento con un equipo de profesionales altamente capacitados para realizar esta tarea, tanto de manera presencial como online, según tu preferencia.
No, el Colegio de Traductores se encarga de la legalización de traducciones realizadas por traductores matriculados en la institución. Es decir, certifica que la firma del traductor está debidamente registrada y que cuenta con una matrícula habilitante para firmar documentos oficiales.